Con 150 años de historia, el Círculo Ecuestre de Barcelona es uno de los lugares más distinguidos de la ciudad. Dentro de su edificio parece que el tiempo se hubiera detenido, manteniéndose ajeno a las modas del siglo XXI.
En la Casa Pérez Samanillo, donde se encuentra la sede, todavía se conservan muchos elementos originales del decorador Joan Esteva. Destaca la impresionante escalinata de mármol, las lámparas de cristal de Murano, los lujosos espejos venecianos, la chimenea, la decoración de los suelos y de los techos con dibujos geométricos y florales, y su ascensor (que es casi una escultura en sí mismo).
El precio de la cuota de inscripción y la forma concreta de acceder a este selecto club, es casi un secreto al alcance de muy pocas personas. Según datos de la revista Vanity Fair, el candidato necesita el aval de cuatro socios, superar un examen que deberá ser validado por la junta de admisión, 12.000 euros y el pago de una cuota mensual de 70 euros.
En el Círculo Ecuestre se preparan reuniones familiares y de negocios, torneos de golf y viajes organizados. Otra actividad clásica del Círculo Ecuestre son las reuniones afterwork, propuestas para el segundo jueves de cada mes. Aquí, los socios e invitados se reúnen durante dos horas y, según detallan desde esta entidad, “se potencia la relación entre socios y se da a conocer a los invitados el día a día del club. Se sirven bebidas y cócteles acompañados de finger foods y amenizado con la música de Gio Calcagno”.
Uno de los puntos de encuentro más sofisticados de Barcelona
Este club privado está ubicado en la calle ‘Balmes’ con la ‘Avinguda Diagonal’. Cuenta, a día de hoy, con algo más de 1.500 socios (de ellos 400 tienen menos de 40 años). Actualmente, sigue siendo uno de los puntos de encuentro más sofisticados de Barcelona; se trata de un lugar ideal donde reunirse para reflexionar, dialogar, leer o debatir sobre asuntos sociales, familiares y empresariales.
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