Las fiestas de La Mercè son una de las citas ineludibles para todo barcelonés. Es la gran fiesta popular de Barcelona, una propuesta que busca ser espejo de la ciudad: una metrópolis que avanza, que propone, inquieta y curiosa. Un evento que mantiene sus tradiciones y costumbres, a la vez que innova y moderniza, impulsando su imparable evolución. La Mercè ocupa un gran número de espacios públicos de Barcelona y ofrece una programación centrada en la cultura mediterránea que, cada año, congrega a más de dos millones de personas para disfrutar de sus numerosas y variadas actividades culturales, lúdicas y artísticas.
Los orígenes de la Mercè se remontan al papado de Pío IX, época en la que el Sumo Pontífice declaró a la Virgen de la Mercè como patrona de la ciudad y así, Barcelona empezó a celebrar sus fiestas en septiembre. La celebración vivió momentos de plenitud y de decadencia en el último tercio del siglo XIX. La Mercè ganó más fuerza en el año 1902, cuando, impulsada por Francesc Cambó, se celebró una Fiesta Mayor que se convertiría en modelo de las que se producen actualmente por toda Catalunya. Una fiesta que pretende mostrar la diversidad folclórica y cultural de la ciudad, como bailes de ‘diables’, ‘gegants’, ‘castellers’, ‘sardanes’, etc. No obstante, hubo constantes enfrentamientos entre aquellos que eran partidarios de una fiesta religiosa y conservadora y aquellos que defendían una fiesta laica. La calma llegó con la democracia, cuando La Mercè alcanzó su carácter de fiesta popular auténtica, gracias a colaboraciones por parte de toda la ciudad.
La Mercè es la patrona de Barcelona y, como todos, cuenta con un origen mitológico. Se cuenta que la noche del 24 de septiembre de 1218, la misma Virgen se apareció simultáneamente al rey Jaime I, a San Pedro Nolasco y a San Ramón de Penyafort. Al ser tiempos de guerra religiosa, a los tres les pidió que creasen una orden religiosa destinado para rescatar a los prisioneros cristianos de los sarracenos. Ese año se fundó la orden de La Merced. En 1687, la ciudad de Barcelona sufrió una plaga de langostas que prometía perjudicar gravemente a la ciudad y sus cosechas. El día 25 de septiembre se incendió el convento de La Merced y el pueblo lo creyó un presagio, tanto que ciudadanos y Consejo de Ciento se comprometieron a nombrar patrona de la ciudad a la Virgen de la Mercè si liberaba a la población de las langostas. El deseo se cumplió y las langostas abandonaron la ciudad, convirtiendo a esta virgen en patrona de Barcelona, título que antes había ostentado Santa Eulàlia en solitario.
Es costumbre que durante La Mercè llueva en Barcelona. Según la leyenda popular, el origen de esas lluvias está causado por Santa Eulàlia, la que fue anterior patrona de la ciudad, que llora desde el cielo con rabia para boicotear las fiestas de la Virgen de la Mercè, su rival. Es importante mencionar que Barcelona cuenta con dos patronas, Santa Eulàlia y la Virgen de la Mercè, que celebran su onomástica el 12 de febrero y el 24 de septiembre respectivamente.
La fiesta de La Mercè apuesta por una programación artística en la que destaca la danza, el circo, las charangas, los conciertos y los espectáculos itinerantes. A ello se le añaden una infinidad de actuaciones nocturnas de gran formato, conformando un gran escenario lleno de ilusión y fantasía. La ciudad de Barcelona, con este importante impulso popular, se ha consolidado como un auténtico punto de encuentro para los mejores artistas nacionales e internacionales. Enlaza pasado, presente y futuro y nunca deja renovarse ni de mantenerse expectante y abierta ante el mundo, incorporando, a través de sus ciudadanos, los elementos que van configurando su identidad y su tradición.
Entre los principales espectáculos destacan de La Mercè, encontramos el ‘toc d’inici’, ‘els gegants’, ‘castellers’, ‘sardanes’, ‘esbarts’, ‘correfocs’, ‘bastoners’, ‘grallers’, ‘trabucaires’ y otros muchos. Sin embargo, esta fiesta incorpora también concursos, exposiciones y una infinidad de conciertos. La programación musical de la fiesta mayor se mantiene gracias a tres principales propuestas: el Festival [BAM], Mercè Música y Cultura Viva. El Festival [BAM] es un evento de música independiente que abarca más de sesenta propuestas en una decena de escenarios. Mercè Música engloba una gran variedad de artistas conocidos en todo el país; la propuesta de este año cuenta con grupos musicales tan famosos como La Casa Azul, Dorian, La Pegatina y otros muchos.
Si estás pensando en vivir La Mercè como un auténtico barcelonés, te exponemos una pequeña selección de las actividades más emblemáticas y famosas de estas fiestas. Antes de la fiesta nocturna, durante el día, es imprescindible descubrir las fiestas populares que se organizan con el nombre ‘Arts de Carrer’: circo, música en movimiento, teatro familiar, ‘gegants’, ‘sardanes’, ‘castellers’ y otros muchos. Estos espectáculos se suelen organizar en La Rambla, la Plaça Sant Jaume y la Catedral. Los más pequeños también están invitados a estas fiestas. La ciudad organiza una infinidad de talleres de teatro, cuentacuentos, pintura y deportes, la mayoría de ellos en el Parc de la Ciutadella. Además, algunos museos de Barcelona programan jornadas de puertas abiertas de forma completamente gratuita, entre ellos el CaixaFòrum, el CCCB, el CosmoCaixa, la Fundació Antoni Tàpies, el MACBA o el MNAC. Puedes consultar los horarios haciendo clic en el enlace: https://www.timeout.es/barcelona/es/que-hacer/la-merce-puertas-abiertas.
Cuando se hace de noche, aparecen las luces. El ‘mapping’ es una propuesta que ha triunfado en los últimos años de fiesta mayor. A la hora de la cena, las fachadas más importantes de la ciudad, como el ayuntamiento o el Hospital de Sant Pau, se iluminan en un impresionante espectáculo lumínico. Tras esta función, llega la música y el baile. La oferta de conciertos y música en directo es inabarcable y se extiende desde La Plaça Espanya, la Plaça Catalunya y la Plaça Reial hasta el Parc del Fòrum, pasando por la Plaça dels Àngels, la Plaça del Rei, Arc de Triomf o L’Antiga Fàbrica Damm.
La Fiesta Mayor termina con el fantástico ‘Piromusical’ en la Font Màgica de Montjuïc, un espectáculo que pinta de luz el cielo, mientras las explosiones de palmeras de fuego se combinan con bloques musicales temáticos que repasan los acontecimientos más importantes del año. Una exhibición de fuegos artificiales, agua en movimiento y música que reúne cada año a miles de personas para celebrar una ceremonia de clausura a la altura de la maravillosa fiesta mayor que es La Mercè.
La creatividad es el motor de La Mercè. Una fiesta que apuesta por artistas de calidad, por múltiples estilos y disciplinas, con propuestas que se llevan a cabo en el espacio público y al aire libre. Esta fiesta mayor quiere ser espejo de una ciudad totalmente abierta al mundo, tradicional y a su vez cosmopolita, renovando su carácter a partir de elementos contemporáneos que contribuyen a acercar el folclore de nuestro pueblo a todos los ciudadanos de la Barcelona actual. La Mercè pretende ser un punto de encuentro de reunión de culturas, orígenes y tradiciones, una diversidad que se ha ido consolidando y que ahora configura la sociedad barcelonesa. Esta festividad es una oportunidad de oro para vivir una Barcelona llena de vida y desde Atipika les invitamos a disfrutarla. ¡Feliz Fiesta Mayor, Barcelona!
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